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El deporte mueve el mundo

Berlín/Brandenburg: entrenamiento deportivo para niñas refugiadas

El deporte es un instrumento efectivo para promover la integración y la participación social. Un proyecto en Berlín y Brandenburgo ayuda a las mujeres y niñas jóvenes a llegar a Alemania.

"Siempre tuve la necesidad de hacer deportes y vivir mis sueños", dice Shogufa Bayat. "Pero solo aquí en Alemania puedo finalmente hacer lo que quiero". El afganino de 22 años está en el programa de "Discover Football". Este Terre Des Hommes entrena a mujeres jóvenes refugiadas como entrenadoras de fútbol y líderes juveniles. Actualmente hay doce mujeres jóvenes de Berlín y Brandenburgo que de otro modo apenas tendrían acceso a capacitación y ofertas deportivas. Si ha pasado por el programa, puede liderar grupos jóvenes y niños o trabajar como entrenadores en instituciones o programas de vacaciones.

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El deporte promueve la participación social

Esto ya no sería posible en Afganistán. "La vida para las niñas es muy difícil. Apenas tienes derechos, tampoco deberías hacer deportes. Las chicas se consideran demasiado débiles para lograr cualquier cosa". Shogufa es un apasionado de la escalada y fue miembro del primer grupo de escalada femenina en su ciudad natal. Ahora está entrenando en Discover Football. La organización está financiada por "A Chance to Play", la campaña conjunta del Volkswagen Group Works Council y Terre Des Hommes . Discover Football está comprometido con los derechos de las niñas y las mujeres jóvenes. El fútbol se usa como un instrumento para fortalecer a las niñas y lograr una participación social real.

Shogufa puede transmitir su conocimiento recién adquirido directamente: como parte del proyecto, un entrenamiento de fútbol de niñas de cuatro días tiene lugar en Berlín, al que también están invitados a los niños de alojamiento de refugiados. De esta manera, los participantes del curso pueden apoyar a las niñas en situaciones de vida similares para llegar a Alemania. En cualquier caso, Shogufa está muy feliz de estar en Alemania. "Mis hermanas también están aquí", dice ella. "Podemos hacer un aprendizaje. Espero que algún día haya paz en Afganistán y podamos regresar a casa. Me gustaría enseñar a las niñas allí y mostrarles nuevas formas".