Tras la caída de Bashar al-Asad, Siria vive un momento histórico crucial, pero las cicatrices de la guerra son profundas y la situación humanitaria sigue siendo tensa. Viviendas e infraestructuras están destruidas y gran parte de la población se ha visto desplazada de sus hogares. En medio de todo esto, los niños son quienes sufren las peores consecuencias: padecen hambre, enfermedades y la pérdida de estabilidad.
¡Tu donación ayuda!
Terre des Hommes lleva años apoyando la ayuda humanitaria en Siria. Ahora es urgente ampliar esta ayuda:
Dale esperanza a los niños: acceso a alimentos, educación y atención psicológica para hacer frente a la violencia experimentada.
Impulse la reconstrucción: apoyo en las escuelas de construcción, hospitales y centros comunitarios.
Dar forma a un futuro: fortalecer la sociedad civil siria y garantizar que todos, independientemente de la etnia o la religión, puedan vivir en paz y dignidad.
"Sinceramente espero que el pueblo de Siria pueda vivir en paz. La guerra ya nos ha costado demasiado."
Bilal Hasaf, de 29 años , es miembro del Presídium de Terre des Hommes . Bilal es kurdo y proviene de la región semiautónoma de Rojava, en el noreste de Siria. En 2015, huyó de la guerra civil siria y llegó a Alemania.
